Construcción de ambientes multimedia.

El uso de ambientes multimedia en la educación, sea presencial o a distancia, permite incrementar el alcance de nuestros objetivos ya que la combinación de texto, arte gráfico, sonido, animación y vídeo que llega a nosotros por computadora u otros medios electrónicos, estimula sensorialmente (y de qué manera) a nuestra audiencia. Un tema presentado con lujos de detalles que conjuga los elementos de multimedia puede capturar la atención del auditorio; y si además le da control interactivo del proceso, la meta esta inexorablemente lograda.

En contraste con lo antes expuesto, hacer que nuestro ambiente multimedia funcione puede ser complicado. Se necesita saber cómo utilizar la herramienta computacional y las tecnologías de multimedia para que trabajen en conjunto. Pero lo más importante, es la aplicación de los criterios y procedimientos de selección de los medios multimedia para la consecución de nuestros objetivos tomando en cuenta la audiencia, el contenido programático y las herramientas disponibles.

Un proyecto de multimedia no tiene que ser interactivo para llamarse multimedia: los usuarios pueden reclinarse en el asiento y verlo como lo hacen en el cine o frente al televisor. En tales casos un proyecto es lineal, pues empieza y corre hasta el final, cuando se da el control de navegación a los usuarios para que exploren a voluntad el contenido multimedia, se convierte en no - lineal e interactiva, y es un puente personal muy poderoso hacia la información.

La inclusión de representaciones bidimensionales de una escena u objeto son de bajo costo y de fácil disponibilidad, el uso y elaboración son relativamente sencillos, además de dar variedad iconográfica a nuestra labor educativa. Los gráficos resumen grandes cantidades de información mediante dibujos, líneas, símbolos y palabras teniendo como ventaja fundamental su capacidad para enfocar la atención de la audiencia y convertir diversidad de información en forma condensada.

Inclusive podríamos utilizar o representar los exhibidores horizontales, que son superficies que presentan en forma visualmente organizada aspectos de importancia o tópicos determinados, empleando el ambiente multimedia para dar la sensación de encontrarse en el ambiente tradicional de clase.

En el mismo orden de ideas, las grabaciones son ideales para transmitir información, ya que garantizan uniformidad en la data verbal. Impregnando de humanidad el medio electrónico por el cual nos valemos para entregar o compartir el conocimiento en cuestión. Es de gran utilidad cuando queremos asegurarnos que sea claro e inteligible nuestro mensaje.

El video, por otra parte, permite observar fenómenos en movimiento produciendo un gran efecto motivante. El mismo ofrece una gama de posibilidades que pueden ser aprovechadas en beneficio de la instrucción, bien sea sincrónica o asincrónica, otorgando al participante la disponibilidad del mismo para cuando lo considere conveniente. Además, fija de manera imperecedera dichos fenómenos observados.

La televisión educativa también ofrece grandes ventajas, tales como la simultaneidad, que al presentar sucesos al momento de ocurrir proporciona una experiencia altamente activa y participativa. Por su puesto, los contenidos pueden variar considerablemente; pero podemos amoldarnos de manera tal, que saquemos el máximo provecho de este recurso con respecto a nuestro objetivo.

También debemos considerar el uso de las tecnologías de información y comunicación (TIC). El abanico de herramientas que proporcionan las TICs, genera un crecimiento ilimitado del conocimiento y la manera como se comparte. La innovación de los ambientes multimedia reside en el aprovechamiento del conocimiento con fines didácticos.

Para finalizar, es vital la preparación del docente. Dada la enorme responsabilidad que tiene como facilitador de conocimientos. Sin olvidar el ambiente, la preparación de los estudiantes, el recurso y la reafirmación del aprendizaje que se conjugan intrínsecamente en una vorágine de experiencias que buscan ser significativas para el entorno educativo.

El ambiente multimedia implica una buena planificación, producción del medio, y evidentemente, la evaluación del mismo. Todos estos aspectos nos permitirán diversificar, innovar, plantear y reafirmar los conocimientos que se desea impartir. La educación avanza de la mano con la tecnología, seamos proactivos e innovadores, utilicemos al máximo de sus bondades.